Solo callate... no necesito que hables, no quiero.
Ya el tiempo ha pasado, a veces rápido otras lento,
pero ha pasado ya...
Guardate tus palabras, las necesité antes no ahora...
Ya avancé, caminé, dejé atrás todo lo que una vez nos unió
hasta el odio que te tuve (y me seguía uniendo a ti) lo dejé atrás...
Ahora soy otra persona, ya no soy la que fui, ni la sombra de lo que dejaste.
Ahora andate, no quiero ver mas tu cara, la sombra de el hombre que alguna vez fuiste,
a penas el recuerdo vago de que alguna vez fuiste verdadero y luminoso,
No pienses en el mal que me hiciste, porque de verdad,
Si para conocer el amor... tuve que conocerte a ti para vivir primero el desamor...
Si para sentir amor verdadero primero tuve que sentir un profundo dolor...
Te lo agradezco,
Pues lo mejor que pudo pasar fue lo que pasó, porque pude volver a reencontrarme y tuve la oportunidad de empezar de cero, me miré al espejo y me vi, ya no era una sombra de ti, era YO, solo Yo.
Andate, no vuelvas, no sufras por el daño causado, tranqulizate fue lo mejor.
martes, 18 de mayo de 2010
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4 comentarios:
Así se habla.. ahora a renacer y vivir que la felicidad está siempre a la vuelta de la esquina.
Besitos.
Asi es... siempre la vida te pone oportunidades de volver a empezar, de renacer y de revivir... Hay que tener fe y recorrer las esquinas, en alguna esta la felicidad!
Besos, gracias por pasar por aquí.
Amigas queridas, que cierto es lo que escribes, y es maravilloso saber como es que nos unen las letras, los sentimientos que sin saberlo nos hermanan.
Hay algo que me hizo reflexionar mucho de tu escrito: el odio sigue siendo un lazo de unión.
Ruego a Dios que pronto mi corazón logre olvidar y lo que es más importante, logre dejar de lado el odio que ahora siente.
Saludos con todo mi corazón Crystalline y Veru.
Querida Libia:
me emociona tanto darme cuenta de lo dices... increible como nos unen los sentimientos... y como la coincidencia (pues por coincidencia llegué a tu blog) inició este profundo lazo de hermandad.
Si, un día me di cuenta que el odio tambien es una forma de unión, asi que te deseo lo mejor en tu camino de olvido y tengo la seguridad que Dios te ayudará a dejar de odiar... y serás nuevamente libre.
Un gran abrazo!!!
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